Reg Prop Intelectual N° 5341307 - ISSN 1667-4839

EJEMPLARES

Año 12 Número 36 - Septiembre de 2014

Del ártico al antártico

Disciplina Ciencias Sociales

Autor/es: Koutodjian, Adolfo

CV: Prof. y Lic. en Geografía. Departamento de Geografía, FFyL, UBA.

Sostenemos enfáticamente que, en la actualidad, las grandes potencias han desatado una verdadera "carrera" por la apropiación de los espacios geográficos libres y deshabitados según el derecho internacional, como en las calotas polares, especialmente en el Ártico, los mares profundos, con yacimientos petrolíferos y mineros. Pero mucho más sutilmente se desarrolla otra carrera en países y territorios semivacíos, de débiles estructuras estatales o con comprobados o probables recursos materiales estratégicos para el desarrollo económico, como Medio Oriente, África subsahariana, etc. Actualmente las grandes potencias han dado paso a una lucha casi descarada por lograr mantener o asegurar el poder mundial, declarando la necesidad de asegurarse energía, insumos críticos, agua dulce o alimentos para sus economías. Como señala Michael Kare , en mayo de 2007, el Dpto. de Energía de EE.UU. informa que la actual matriz energética basada en el petróleo se sostendrá, a lo sumo, hasta 2030 y habrá que desarrollar fuentes sustitutas de energía. Cabe mencionar, no obstante, que aquí diferimos sustancialmente acerca del "agotamiento" de los recursos petrolíferos; hoy se los busca en aquellas zonas donde hasta ahora era más difícil y caro encontrarlo: en el último quinquenio, el 80 % de los nuevos yacimientos surgen en el Golfo de Guinea africano, región que contaba muy poco en la escena mundial. Siendo la cuestión energética el quid del Poder Mundial, el petróleo sigue siendo la fuente principal de energía mundial si bien su participación viene disminuyendo desde 1980. Sin embargo se lo está sustituyendo por gas y carbón y, en menor grado, por energía nuclear que resurge en los últimos años.Para la seguridad energética es fundamental la diversificación, dado que el costo del desabastecimiento es superior al costo de asegurarlo. Este elemento es esencial para entender qué política deben seguir los países emergentes respecto del petróleo. La escasez de agua dulce en las próximas décadas alcanzará a casi todo el centro, sureste y suroeste de Eurasia. La mitad de la humanidad pertenece a regiones de criticidad o "estrés hídrico" ya sea por cuencas superficiales o subterráneas. El crecimiento de las fronteras agrícolas y la urbanización están llevando a crecientes rivalidades por el agua potable a costos de mercados, sin dejar de tener en cuenta que el agua dulce, como recurso vulnerable finito, tiene un fuerte valor ambiental. Esto acompaña a la pérdida de tierra cultivable a nivel mundial. Sólo hay tres grandes regiones, donde la frontera agrícola puede expandirse: Rusia, Australia y Sudamérica atlántica. Asimismo, el bosque nativo ha disminuido, a nivel planetario, casi a la mitad en el último siglo. Respecto a la producción alimentaria, la Organización Alimentaria Mundial muestra un dramático cuadro del desbalance mundial previsto para 2025 si las tendencias actuales se mantienen. Junto a esto, no podemos dejar de señalar al problema demográfico, importante factor de inestabilidad, en sus múltiples facetas: la estática y la dinámica demográfica, el fenómeno étnico y cultural, la presión demográfica de la pobreza, e incluso, hoy en día, los "refugiados ambientales".

< acuerdos consensuados > < agua dulce > < alimentos > < apropiación > < bosque nativo > < costo de desabastecimiento > < desbalance mundial > < diversificación > < economía no sustentable > < energía > < espacios libres > < estrés hídrico > < fuentes sustitutos de energía > < insumos críticos > < petróleo > < problema demográfico > < producción alimentaria > < rol académico > < tierras cultivables > < valor ambiental >

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